Antros de perversión

Seguimos terminando de modelar el cuerpo...Estos días he aprovechado para hacer un poco de walkabout, es decir, pasear, sin rumbo fijo por alguna capital española... simplemente observando las prisas de la gente, el día a día, esos pequeños detalles...

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Si hallas un camino sin obstáculos, desconfía. Lo probable es que no conduce a ninguna parte

Después de pasar un ratito por Toledo, como tenía la tarde libre, me fui para Madrid, y estando en un bar de barrio (me encantan este tipo de sitios, por la gente peculiar que te puedes encontrar..) sin querer, me metí en la conversación de dos vecinos...que comentaban el nuevo local que habían abierto al final de la calle, "un antro de perversión, a saber lo que hagan dentro, no le viene bien al barrio".

Si vas a hacer algo relacionado con el sexo, debería ser cuanto menos genuinamente perverso. (Grant Morrison)

Claro, después de escuchar eso...y sabiendo que la curiosidad mató al gato, me dispuse a sacar de dudas a ese par de vecinos...y me fui calle abajo, toque al timbre y tras pagar la entrada unas puertas que conducian a la penumbra, como un pub, barras, piscinas, camas, en mitad de la nada, en un barrio de Madrid, cercano a la Avenida de América... y, tras varias horas en el local... definitivamente le doy la razón a los vecinos... un antro de perversión, en el que la gente va a sacar sus fantasías mas ocultas, para tras unas largas horas, volver a la realidad... No será la ultima vez...

Te recompensaré mis ausencias....